Descripción
Prefacio
Es nuestra santa epopeya contra las huestes napoleónicas, página que el pueblo labró con una constancia cien veces admirable, hay un nombre que sintetiza el valor hispano, jamás vencido ni humillado: ese nombre es el de un hijo de Antequera, don Vicente Moreno. Entre los héroes de aquella lucha que al patriotismo y á la fe cantaron tan bellamente con arrogante desprecio de la vida, el insigne antequerano es la personificación augusta del valor espléndido, del sufrimiento inmaculado, dé la muerte arrobadora entre los héroes que la patria pone en sus altares, destácase la figura sugestiva de Moreno, que tuvo victorias en su mando, gentileza en su prisión, sonrisa para sus dolores y grandeza sin igual en su muerte afrentosa. El Capitán Moreno es la representación más adecuada de una España que ni se abate ni se humilla en aquel egregio antequerano sus amarguras son contentos y su caída es altivez no trastorna su cerebro el cautiverio que le oprime, ni debilitan su alma los tormentos que le punzan la muerte de sus soldados, los llantos de sus hijos, la presencia acongojada de su mujer, las heridas mal curadas y otros varios resortes hábilmente empleados, no consiguen doblegar la entereza de aquel prisionero cuya aspiración amorosa es ser grato á su Patria y leal á su Rey.
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